La creación de videos con inteligencia artificial (IA) está revolucionando el mundo, ofreciendo numerosas ventajas que transforman la manera en que las empresas producen contenido audiovisual. Una de las bondades más destacadas es la reducción de costes. La I.A. permite generar videos de alta calidad sin necesidad de grandes inversiones en equipos, personal o desplazamientos.  Por ejemplo, se pueden recrear ambientes de difícil acceso o lugares que serían muy costosos de grabar en la vida real, como paisajes exóticos o escenarios históricos.

Además, los videos generados con I.A. ofrecen una flexibilidad sin precedentes. Las empresas pueden personalizar contenido de manera rápida y eficiente, adaptándolo a diferentes mercados y audiencias sin incurrir en grandes gastos adicionales de producción. Esto es especialmente útil para la creación de material de stock, donde la I.A. puede generar múltiples variaciones de un mismo tema, permitiendo a las empresas disponer de un amplio banco de recursos audiovisuales.

Gracias a la inteligencia artificial, ahora es posible materializar cualquier idea que podamos imaginar.