La producción audiovisual es el conjunto de tareas desarrolladas de manera coordinada por diferentes profesionales cuya meta es la elaboración de productos audiovisuales (vídeos) de todo tipo, desde películas o series de televisión a documentales, cortometrajes, vídeos corporativos, anuncios de publicidad, vídeo – clips musicales, etcétera.
Básicamente, la producción audiovisual es una labor de organización, coordinación y estrategia. En ella participan profesionales de muy diferentes perfiles (cámaras, guionistas, fotógrafos, productores, directores de arte, publicistas, creativos, ayudantes…) y todos ellos deben unir sus conocimientos, talento y experiencia de manera coordinada y colaborativa para que, lo que en un principio es tan sólo una idea, acabe por transformarse en un producto audiovisual de gran calidad que responda a las necesidades y demandas del cliente.
La producción audiovisual requiere de grandes esfuerzos y recursos, tanto económicos como humanos. Un spot de televisión de apenas veinte segundos de duración esconde tras de sí meses de intenso trabajo que se desarrolla a lo largo de tres fases:
- Fase de pre – producción, tanto o más importante que el resto de fases pues en este momento se sentarán las bases del proyecto y se concretarán el presupuesto, los medios que se van a utilizar, los profesionales que van a participar, las localizaciones que se emplearán, etcétera.
- Fase de producción. Es la eta de rodaje en sí misma, la fase en la que se pondrán en práctica todas las decisiones tomadas en la fase de pre – producción.
- Fase de post – producción. En esta fase, el director y el realizador tienen un papel esencial ya que ellos decidirán qué material grabado será utilizado en el montaje final, además de hacerse este montaje y las tareas de edición necesarias para lograr el producto audiovisual deseado, lo que incluye la inserción de títulos, subtítulos, música, doblaje, etcétera.